lunes, 13 de mayo de 2019

Periplo al marasmo

Foto de Natalia Valdés



No importa que mires el calendario.
Observa los edificios y el color del mar al atardecer. 
El agua se turbia con olor a bronceado.
Los panales de hormigón chirrían y tiemblan. 
El marasmo está por llegar.
Las medusas navegan jugando con la espuma para llegar transparentes e inertes a la orilla. 
Suena la alarma y ondea la bandera roja. 
Los peregrinos tuestan sus carnes y riegan su gaznate hasta ser reos de una dipsomanía estival. 
Suena una sirena.
Otros han logrado regresar.
En el invierno insípido y vacío no hay medusas, se han ido a otro mar.

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